La Martina
Quince años tenía Martina,
cuando su amor me entregó.
A los diez y seis cumplidos,
una traición me jugó.
Estaban en la conquista,
cuando el marido llegó.
¿Qué estás haciendo Martina?
que no estás en tu color.
Aquí me he estado sentada,
no me he podido dormir,
si me tenes desconfianza,
no te separes de mí.
¿De quién es esa pistola,
de quién es ese reloj,
de quién es ese caballo?
que en el corral relinchó.
Ese caballo es muy tuyo,
tu papá te lo mandó,
pa' que fueras a la boda,
de tu hermana la menor.
Yo pa' qué quiero caballos,
si caballos tengo yo,
lo que quiero es que me digas,
quién en mi cama durmió.
En tu cama nadie duerme,
cuando tú no estás aquí,
si me tenes desconfianza,
no te separes de mí.
Y la agarró de las greñas,
y a sus padres la entregó,
suegros aquí está Martina,
que una traición me jugó.
Llévatela tú, mi yerno,
la iglesia te la entregó,
si una traición te ha jugado,
la culpa no tengo yo.
Incadita de rodillas,
nomás seis tiros le dio,
y el amigo del caballo,
ni por la silla volvió.