Los Maestros
Déjame que recuerde esa historia que pasó hace ya mucho tiempo
Déjame que les quite esta losa que tapó con su peso de silencio
Déjame que las riegue de lágrimas para borrarles el miedo
Déjame que las riegue de rabia por imaginar aquello
Déjame que en estas líneas escritas regrese a los maestros
Que dieron su vida y su sangre por dar al pueblo conocimiento
De nada sirvieron sus gritos de angustia antes del fusilamiento
Iglesia y caciques, misas y Estado los prefieren analfabetos
Con ellos peligra el tiempo que ocupa el crucifijo y la moral
de clero
Por eso estas líneas desordenadas van en dirección de su recuerdo
Déjame que recuerde esa historia que pasó hace ya mucho tiempo
Lo que entierran no son huesos, son las semillas que van creciendo
Lo que entierran no son huesos, son las semillas que van creciendo