Las 2, las 3, toqué tu timbre.
No atendías, volví a intentar.
Era yo golpeaba y gritaba,
que por tu ventana se puede escapar.
Pero vos no escuchás tan colgada que estás,
viendo una porno sin codificar,
donde imaginás que ellos se aman
que tienen la onda que vos no encontrás.
Las 6, 7 grité tu nombre.
No te rías, es verdad.
Era yo
la sombra de un hombre
que 3 horas antes sintió caminar.
Caminé bajo el sol sin mirar hacia atrás
vi los juegos,
me vi en tu ciudad
diciéndote hoy
te presto mi onda.
Usala, es mejor, te digo que hoy yo te presto mi onda.
Te digo hoy que presto mi onda.
Usala es mejor te digo que hoy yo te presto mi onda.
Onda, onda, onda.