Si la angustia no tuviera tantos meses,
si pudiera huir de esta ciudad,
si el milagro de los panes y los peces
consiguiera darnos de cenar.
Si tuvieran corazón las autopistas,
si alguien me esperara en la estación,
si bajaran de la luna los artistas,
si acabara bien esta canción.
Si aprendiéramos a amar como animales,
si quedara tiempo que perder,
si bailaran rocanrol los generales,
si cantara el gallo rojo del amanecer.
Y los sentidos olvidaran la razón.
Y las golondrinas
supieran volver
a hacer su nido cada otoño en el reloj
de las oficinas,
si el huracán del porvenir
arrasara las fronteras
rotas las banderas por la pasión,
si reinara en el dos mil
la imaginación.
Si el silencio cotizara más que el oro,
si encontrara hotel en Shangri-Lá,
si la muerte hiciera motis por el foro,
si pudiera yo quererte hasta el final
y naufragar
en la isla del tesoro,
si los mercenarios de la soledad
incendiaran con un blues
todo el cono sur.
Si en los escombros de la revolución
creciera el árbol verde del placer,
y las catedrales se cansaran de ser
ruinas del fracaso de Dios.
Si volvieran los dragones a poblar las avenidas
de un planeta que se suicida.
Si volvieran los dragones...
Si volvieran los dragones...
Si volvieran los dragones,
Robin Hood, las amazonas,
Marco Polo, Nosferatu, Garcilazo,
Casanova, Buster Keaton, Mandahari, Don Quijote,
Macedonio, Moby Dick, Los Bucaneros,
Nostradamus, Celedonio, Sargent Pepper,
Goyeneche, Sitting Bull, La violetera,
Janis Joplin, Doctor Jekyll, D'Artagnan,
la primavera, el Cantar de los Cantares, Greta Garbo,
el Tempranillo, Babilónia, Julio Verne, Camarón,
los conventillos, Gulliver, Sierra Maestra, Bonny and Clyde,
La Magdalena, Camelot, los alquimistas,
Atahualpa, Bonavena, la tetona de Fellini, Bakunin,
las ilusiones, Espartaco, Mesalina, la cigueña,
los bufones,
Si volvieran los dragones.