Hay tantas cosas que no te di,
tantos besos que me perdí
que aplacé por crecer, por vivir.
Hoy yo te quiero pedir perdón
por no ser un hijo mejor
y olvidar que sin ti no soy yo.
Nunca te alejes de mí,
estoy solo y no sé qué camino elegir,
sigo siendo el niño aquel.
Aunque estés lejos de mí
yo te llevo en mi piel, yo he salido de ti.
Moriré siendo de ti.
Sé que en tu pelo ayer nevó,
que tus canas te las pintó
el reloj con el tinte de una flor.
Ven, que se escurra la soledad
por tu sonrisa y no volverá,
pues tu piel todavía huele a él.
Nunca te alejes de mí,
estoy solo y no sé qué camino elegir,
sigo siendo el niño aquel.
Aunque estés lejos de mí
yo te llevo en mi piel, yo he salido de ti.
Moriré siendo de ti.
(Gracias a Alejo Jaramillo por esta letra)