Déjame ir
Cuando me robaste la mirada y no tenías permiso,
comprendí que con un dedo no se tapa el sol.
Yo subestimé tus besos, me atrapó tu hechizo,
por jugar tanto con fuego quemé el corazón.
Y aunque siempre estuvo en nuestros planes
seguir el libreto, de repente llega un beso y toca
improvisar.
Culparé a tus labios rotos y a tus bailes lentos,
de que no fuimos capaces de reaccionar.
Si es por mí te obligaré a quedarte
pero el viento hoy sopla a tu favor,
y si cuesta una vida atraparte no lo hagas peor.
Déjame ir, prohíbile a tus ojos robarme el aliento
obliga a tu boca que procure estar lejos.
Déjame ir, ordénale a tus manos no tocar mi puerta,
va a ser mejor si no se enteran que está abierta.
Mi corazón no va a aguantar si no me sueltas,
déjame ir.
Y aunque tenga escritos tantos planes
para que me quieras,
sé que es cierto que el amor es un juego de dos,
porque eso de ser tu amigo sin romper las reglas, hoy quisiera ser honesto jamás funcionó.
Si es por mí te obligaré a quedarte
pero el viento hoy sopla a tu favor,
y si cuesta una vida atraparte no lo hagas peor.
Déjame ir, prohíbile a tus ojos robarme el aliento,
obliga a tu boca que procure estar lejos.
Déjame ir, ordénale a tus manos no tocar mi puerta,
va a ser mejor si no se enteran que está abierta.
Mi corazón no va a aguantar si no me sueltas,
déjame ir.
Olvídate de todo lo que sabes,
no vayas a esperar que yo te extrañe.
No quiero que vengas ni un solo segundo
a pedirme perdón.
Olvídate de todo lo que sabes,
no vayas a esperar que yo te extrañe
y borra cada letra aunque sea tu canción.
Quédate aquí, permitele a tus ojos robarme el aliento
obliga a tu boca que ya nunca este lejos.
Quédate aquí, obliga a tus manos tocar a mi puerta
va a ser mejor cuando se enteren que está abierta.
Y aunque al final no tenga todas las respuestas
mi corazón no va a aguantar si tu lo sueltas.
Quédate aquí