Siento que puedo equivocarme
tarde o temprano acabaré
en la red de un hombre como tú
sin precauciones ni tabúes
estúpidamente fiel
tanto jugar a la ruleta
ante las puertas del azar
tiene que ponerme alguna vez
entre la espada y la pared
igual que hoy.
Basta enamorarse nuevamente
para descubrir que de repente
(con el poder del amor)
se puede vestir de azul
la noche más negra y ver
cómo florecen los almendros
en invierno.
Basta enamorarse nuevamente
para que los ojos como siempre
(con el poder del amor)
se olviden de vigilar
dejándolos de vigilar
dejándonos caminar
por arenas movedizas sin dudar.
Claro que puedo hacer a un lado
todo el pasado y comenzar
por adaptarme a cada situación
ayer gacela y hoy león
y tú también.