En Caborca la cosechan
sobre arenas del desierto
traigo mil quinientas libras,
Javier le dice a Florencio
calidad certificada
pero va a costarte un huevo.
Salazar tráeme esa merca
tu sabes que soy derecho
el dinero no es problema
pero no me gusta el riesgo
si en Tuczon tu me la pones
le podrás doblar el precio.
Quitale el nudo ala bolsa
y pásame una tarjeta
que esta lavada si pone,
y la mente me despeja
voy a darme otra esquinita
ya esta cerca la frontera.
Dosty ryan y el Bowell
los que Javier sobornaba
eran gringos de la DEA
que le gustaba la lana
muy ansiosos por mirarlo
en la línea lo esperaban.
Cien mil dólares fue el trato
por permanecer callados
tenían que burlar los migras
y a los perros inyectaron,
les pasaron una dosis y perdieron el olfato.
De cuando hablo con Florencio
tres días no habían pasado
cuando le entrego la carga
trabajo garantizado
por que siempre abren la puerta
cuando va a pasar el amo