Permíteme contarte cosas desagradables
Que han pasado en tu ausencia
Que desde que te fuiste esta cama me sirve
Sólo para dar vueltas, amor
Y el aire se ha queda’o para’o…
Sin tí he de respirar forza’o…
Y ahora acompaño las madrugadas
Tan sólo por volver a ver tu cara, tu cara, tu cara…
Y se murió de pena la paloma
Que en el parque se paraba
A vernos compartir
A vernos sonreír
Y se me puso vaga la sonrisa
Y unos besos se oxidaron
Porque eran para ti
Y yo no te los di
A la hora de comer en tu silla vacía
Se sienta la tristeza, amor
Solo me hago el amor aunque no estés aquí
Pensando en tu presencia
Y el aire se ha quedado para’o…
Mira, y eso duele y desespera
Sin tí he de respirar forza’o…
Te ando buscando, mi vida, mi vida
Y ahora acompaño las madrugadas
Senta’o a ver si vuelves
Y veo tu cara, y veo tu cara, y veo tu cara
Y esto sí me duele, ay!
Y es que tú, tú me has cambia’o la vida
Y cuánto, cuánto te extraño, amor
Duele, duele… tanto
Tú eres mi reina, mi mujer elegida