Si señor, si señor.
El vino puede sacar cosas que el hombre se calla.
Que deberian salir cuando el hombre bebe agua.
Va buscando pecho adentro por los silencios del alma,
y les va poniendo voces, y los va haciendo palabras.
A veces saca una pena. Que por ser pena es amarga.
Sobre su palco de fuego la pone a bailar descalza.
Baila y bailando se crece, hasta que el vino se acaba.
Y entonces vuelve la pena, a ser silencio del alma.
Si señor..
El vino puede sacar cosas que el hombre se calla.
Cosas que queman por dentro.
Cosas que pudren el alma
de los que bajan los ojos,
de los que esconden la cara.
El Vino entonces libera la valentia encerrada
y los disfraza de machos, como por arte de magia
Y entonces son brabucones, hasta que el vino se acaba..
Pues del maton al cobarde, solo media la resaca.
Si señor...
El vino puede sacar cosas que el hombre se calla.
Cambia el prisma de esas cosas cuando mas les hace falta.
A los que llevan sus culpas como una cruz a la espalda.
La Puta se piensa pura, como cuando era muchacha
y el cornudo regatea, la medida de sus astas.
Y todo tiene colores de castidad, simulada.
Pues siempre acaban el Vino, los dos, en la misma cama.
Si señor...
El vino puede sacar cosas que el hombre se calla.
Pero que lindo es el vino, el que se bebe en la casa
del que esta limpio por dentro y tiene brillando el alma.
Que nunca le tiembla el pulso cuando pulsa una guitarra.
Que no le falta un amigo, ni noches para gastarlas.
Que cuando tiene una pecado, siempre se nota en su cara.
Que bebe el vino por vino.
Y bebe el agua por agua.