Una mañana la lluvia temprana
sin un abrigo te trae hasta aquí.
No necesito hablar, comprendo tu mirada,
lo que tus ojos me quieren decir.
Ya lo sé, tu eres como el viento
y no te dejas atrapar.
Vuelves a mí cansada,
de tanto andar sin un lugar
Hoy otra vez cuando te miro en mi cama
No quiero dejarte escapar
Eres tan fuerte que a todo te atreves
Eres tan frágil que te quiero abrazar
No tienes miedo al confesarme lo que sientes
Soy el refugio que te abrigará
Desperté mil noches preguntándome
si amarte no es dejarte ir
Vuelves a mi cansada
de tanto andar sin un lugar
Hoy comprendí que es imposible atraparte,
debo dejarte volar.