Salmo 140
Líbrame, oh Jehová, del hombre malo;
guárdame de hombres violentos,
Los cuales maquinan males en el corazón,
cada día urden contiendas.
Aguzaron su lengua como la serpiente
veneno de áspid hay debajo de sus labios
Guárdame, oh Jehová, de manos del impío;
líbrame de hombres injuriosos,
Que han pensado trastornar mis pasos.
Me han puesto cuerdas de soberbia;
Han tendido red junto a la senda;
me han puesto lazos.
/// No concedas al impío sus deseos;
No saques adelante su pensamiento
para que jamás se ensoberbezca.///