(Canción)
“ Poleo, carqueja, flor de romerillo,
yuyos milagreros, yerbas pa’ olvidar “.
Llenabas las siestas con tu voz de grillo,
cuando aparecías por el arenal.
Se te vio en las carpas y en las procesiones,
místico y profano rezar y bailar,
pregonando en medio de las libaciones:
“ Yuyitos del campo, pa’l bien y pa’l mal”.
Vendedor de yuyos,
¡ cuántos resentidos buscaban tu alforja,
sintiendo el pregón ¡.
Ese fue el destino de tu triste vida:
vivir en silencio, vendiendo ilusión.
Te dormiste un día, vendedor de yuyos,
con un sueño largo, cansado de andar.
Nunca más se oyeron los pregones tuyos:
“ Yuyitos del campo, pa’l bien y pa’l mal”.
“ Poleo, carqueja, flor de romerillo,
yuyos milagreros, yerbas pa’ olvidar “.
Llenabas las siestas con tu voz de grillo,
cuando aparecías por el arenal.